Malinowski me llevó a viajar, la pandemia al turismo
- Camila Mora
- 20 ago
- 2 Min. de lectura
Hola, soy Camila Mora Caneva, antropóloga de formación, viajera por convicción y, ahora, quiero escribir blogs de viajes jajaja. Antes de empezar este sueño de crear contenido que enseñe e inspire, quiero presentarme para que sepan quién está detrás de estas etnografías e historias.
Desde pequeña descubrí mi pasión por las personas, por el servicio y por la aventura. Crecí jugando al aire libre, trepándome a los árboles, explorando insectos y soñando con lugares nuevos. Siempre me intrigó conocer al otro, ese diferente, con sus vivencias, costumbres e historias que lo hacen único. La rutina de oficina nunca fue lo mío, y muy pronto entendí que necesitaba un camino que me permitiera movimiento, conversación y contacto humano.
Así llegué a la antropología, que empecé a estudiar en 2013. Me fascinó aprender de los primeros viajeros como Malinowski, llevé mi diario de campo, hice entrevistas y observación participante. Sin embargo, después de producir contenido científico, descubrí que la academia no me apasionaba tanto como pensaba, mis palabras llegaban solo a un círculo reducido de académicos, cuando lo que yo quería era llegar a más personas, conectar, inspirar y transformar.
La pandemia me llevó a un punto de quiebre. Sin trabajo y en medio de la crisis, apareció el turismo en mi vida. Al principio lo miraba con desconfianza, pero pronto descubrí un turismo diferente, el comunitario, sostenible y de naturaleza, que ofrece esperanza en territorios golpeados por la violencia, la estigmatización y la desigualdad. A través de esas experiencias entendí que viajar también puede ser un acto de transformación social.
De ahí nació Rizoma Travel, un proyecto para dar a conocer un país que es mucho más que estereotipos. Colombia no es solo café, coca o mujeres lindas; tampoco es solo Bogotá, Cartagena y Medellín. Somos un territorio múltiple, diverso y profundamente humano con decenas de acentos, cocinas, lenguas, paisajes y rostros que nos recuerdan que en realidad habitamos muchos países dentro de uno solo.
Hoy escribo porque creo que viajar nos educa, nos conecta y nos permite construir futuro. Tal vez este blog lo lean dos personas o doscientas, pero si logramos sembrar curiosidad, conciencia y amor por este país, el propósito estará cumplido.
Les invito a recorrer conmigo esta Colombia que duele y también abraza, que enfrenta realidades duras pero sigue brillando por su calidad humana, biodiversidad y riqueza cultural. Ojalá estas palabras no aburran, sino que despierten ganas de conocer, viajar y aportar, aunque sea un poco, a un país mejor.









Excelente reflexión! 🥰
Me encanta! Por más blogs viajeros!